Uno de los grandes maestros de generaciones de la musica folklorica, nacional e internacionales; organizador de grandes conciertos y de grupos musicales; este es el profesor Valdemar Portillo Mejia. Escibo este dia como un homenaje al hombre que descubriò mi talento musical en mis años de estudio en mi adorado Instituto Central Vicente Caceres de Tegucigalpa, con orgullo ex alumno del profesor Valdemar Portillo; por sus manos pasaron musicos como Miguel Rivera (Mike`s Epoca), voces como la de Coralia Rivera hoy de Coca; manos experimentadas en la baterìa como Victor Melendez hoy un medico y excelente funcionario de salud y otros tantos mas que tuvimos la dicha de ser alumnos y compañeros de la estudiantina del Central, pero de la verdadera de aquellos años.
Valdemar Portillo Mejia oriundo de San Francisco de Ojuera, Santa Bàrbara; se diò a la tarea de estudiar musica, conoce todos los instrumentos y hasta la caramba; un excentrico educador de masas; catedratico de muchos institutos del pais; con su experiencia y dejando huella de su pueblo hondureño ha expandido su trinchera musical por toda Amèrica y no digamos de los ultimos rincones de Honduras; ha grabado discos con musica de marimba, piano y orquestales con grandes compositores y cantantes. Hablar de Valdemas es remontarse a la epoca centralista, donde conoci a los mejores maestros del mundo, ni la seña de los maestros de hoy dia (sin ofender).
Me siento embargado de satisfacciòn porque hice un viaje con el profesor y durante cuatro horas seguidas el viaje se hizo corto; pues la platica estuvo amenisima recordando a todos mis maestros los que se fueron y los que se quedaron y las experiencias vividas en la estudiantina, nuestras presentaciones y nuestros viajes a cualquier parte; momentos de emociòn al lado de mi gran maestro, gracias a Dios y a èl por ayudarme a descubrir este don musical, si no hubiere sido asì al sol de hoy creo que este don hubiera muerto en silencio conmigo.
Gracias Valdemar Portillo por sus consejos, sus enseñanzas este es un homenaje a este insigne maestro de generaciones de grandes hombres y mujeres, que a igual que el que escribe nos sentimos llenos de gozo y emociòn cuando entonamos en nuestros instrumentos musicales, aquellas canciones de Lidia Handal, Toño y Paco Medina; folkloricas, los himnos nacionales de las Americas y toda una gama de piezas musicales; gracias por las marimbas, por los acordeones y las flautas, Dios le prodigue muchos años de vida para que ese don maravilloso circunde todos los rincones de Honduras y de nuestros corazones.
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