MIS TIEMPO EN LA CRUZ ROJA HONDUREÑA

EL AYER Y HOY DE LA CRUZ ROJA HONDUREÑA.- UN HOMENAJE A LOS SOCORRISTAS VOLUNTARIOS. HABLANDO DEL 8 DE MAYO DIA INTERNACIONAL DE LA CRUZ ROJA

El Ayer y Hoy del Voluntariado Por HERNAN SAMAYOA (SV-1976)

Paginas de Gloria y letras de oro para la posteridad, se han escrito infinidad de veces para enaltecer a personas con cualidades y dones que solo el Todopoderoso en su infinita misericordia, supo dar a cada quien o cada cual.

La Cruz Roja desde tiempos antiguos, en el mes de las flores nació bajo el ideal de servicio y del sufrimiento desde Solferino; del corazón abnegado y desinteresado de su fundador Henry Dunant (premio Nobel de la paz compartido) y de los ejemplos altruistas de Florence Nightingale en aquella época de guerra.

Hablar de Cruz Roja es hablar de paz, de humanidad, de altruismo, de Unidad, de Imparcialidad, de Voluntariado, de Servicio, de abnegación, de Neutralidad y de solidaridad; eso es hablar de Cruz Roja, lo mas grande que le puede suceder a una persona cuando ha cruzado sus umbrales y mas que recuerdo es parte de nuestra vida.

En virtud del bosquejo anterior, allá por el año de 1937 hubo dos intentos para organizar lo que hoy es la CRUZ ROJA HONDUREÑA (CRH) y, por iniciativa del Doctor Ernesto Lazarus, su esposa doña Enriqueta Girón de Lazarus se propone a organizarla y es a ella a quien se debe su fundación, sumada a la colaboración de grandes personajes de la sociedad hondureña tales como: el Doctor Jorge Fidel Duron, don Romualdo B. Zepeda, el sacerdote Emilio Morales, doña Laura de Gálvez, doña Laura de Lozano, doña Berta de Sáenz, doña Isolina Guillen, don Benjamin Guzmán, doña Bertilia Williams, y la señora de apellido Bernhard.

El acta de constitución de la CRH se firmo en el mes de septiembre de 1937 y se le concedió la personería Jurídica durante la administración del Doctor Tiburcio Carias Andino. Doña Enriqueta como cariñosamente le conocíamos según la historia de su propia boca, inicio en su casa del barrio La Fuente, un consultorio infantil, con la colaboración de distinguidos profesionales médicos y damas de Tegucigalpa como Ramón Villeda Morales (después fue Presidente de la Republica) y su esposa doña Alejandrina Bermúdez; Ramón Alcerro Castro (h) Héctor Membreño, el doctor Angel Vargas, Marcial y Manuel Cáceres Vigil, entre otros y en los años subsiguientes extendió estos servicios a las ciudades mas importantes del país con el apoyo del Gobierno de la Republica consistente en una donación anual. En la ciudad de La Ceiba se organizo el primer grupo de Damas Voluntarias. La CRH ha sobrevivido a todos los acontecimientos políticos, sindicales y naturales desde el año de su fundación hasta el día de hoy.

Se crea el Cuerpo de Socorristas voluntarios el 13 de agosto de 1966 y el 17 de Junio de 1974 se crea la Unidad de Cadetes de la Juventud en el Instituto Central de Varones de Tegucigalpa. Entre los primeros voluntarios que adquirieron el Grado de Socorrista Voluntario (SV) figuran en nuestro recuerdo unos que ya se fueron y otros que aun quedan en las paginas gloriosas de la Institución: Nelson Flores (dirigente de los Cadetes); Carlos Reyes, José Mora Duron y hermano del insigne profesor Manuel Mora Duron ( director de la CRH); Rolando Mendoza Breve, Roberto Sandoval (Primer Comandante del Cuerpo de Socorristas) Lidia Rosa López, Guillermo Quilico, Jorge Alberto Roque, Darío Zelaya, Armando Ferrari ( dirigía el único Cuadro de Danzas que existió hasta 1982); José Mario Rivera, Antonio Young Torres, Eulalio Moncada (Lalo), Luis Felipe Pierrot ( colaborador de noticiero de Televicentro)  fallecido; Miguel Fernando Paz (Don Michel Q.D.D.G.) quien fue el primer enfermero de la CRH y auxiliar de la famosa ambulancia “La Garzona” y la 01; Israel Navarro, Rene Bendaña, Héctor Molina, Ondina Ham y Roberto Zúñiga.

Doña Enriqueta tuvo la iniciativa en principio, de organizar el Banco de Sangre, agenciándose con las cuotas de los socios contribuyentes el mantenedor de bolsas y un centrifugador, pero este requería de muchos más fondos para extenderlo a San Pedro Sula para su sostenimiento. Para los años subsiguientes se declaró a la Fundadora de la Cruz Roja Hondureña: PRESIDENTA HONORARIA VITALICIA, quien prácticamente se retiro de sus funciones de la Institución, dejándola en manos de un Consejo Nacional y del Director General profesor Mora Duron (Hoy don Manuel es sacerdote en la diocesis de Danli).

Gracias a la iniciativa de doña Queta, fue hasta el año de 1978 que se inauguró formalmente el Centro Nacional de Sangre, ya para estos años la CRH contaba con la colaboración de doña Meneca Biagosh de Mencia quien fue una de sus iniciadoras desde el Comité de Damas Voluntarias, quienes entre uno de sus mejores programas ha sido el “vaso de leche” del cual yo también me beneficie.

UN HOMENAJE AL SOCORRISTA VOLUNTARIO
Y A QUIENES PARTICIPARON EN LA VIDA INSTITUCIONAL DE LA CRUZ ROJA HONDUREÑA

En aquellas épocas cuando decidimos formar parte de esta gran familia Cruzrojista en la Unidad de Cadetes Lideres de la Juventud (1970-1983); aprendimos a confiar en nosotros mismos, en nuestros instintos y esto porque otrora el que llegaba a estas filas, iniciaba una carrera, una escuela para la vida y que me llevo dentro de la Unidad de Cadetes a ser su Coordinador Nacional por breve tiempo.

Fueron épocas de gloria para el voluntariado; todos, forjados en el mismo yunque de la abnegación, el altruismo, el respeto a la vida, el servicio y la solidaridad humana; esto nos inducía a apaciguar el sufrimiento de los demás, comprender la mística cruzrojista de los que nada tienen; formando en las comunidades y escuelas grupos de apoyo; creando centros juveniles para despertar en los jóvenes el interés de las actividades sanas como el deporte, folklore, y el servicio a las mismas. Nuestra enseñanza paramilitar y paramédica influyo en la necesidad de formar parte en el servicio de enseñanza en Academias militares y Hospitales.

Gratos recuerdos quedan del servicio de aquella época dorada de la CRH; grandes hombres y mujeres que a la sazón descubrieron su vocación profesional; donde hoy tenemos lumbreras en enfermería, en medicina y sus especialidades, abogados, Ingenieros y otros acorde a su vocación, laborando en Organismos Internacionales y Hospitales unos y otros de forma independiente; dando asì fe, de esta genuina vocación que solo nuestra amada CRH pudo darnos en esos tiempos, que quizá si no la hubiésemos encontrado otro hubiere sido nuestro destino para bien o para mal.

Y asì como los SV de nuestra época con quienes compartimos momentos agradables, amenos, gozosos en el devenir de los tiempos por el deber hacia los demás, durante las acciones de socorro en terremotos, incendios, inundaciones dentro y fuera del país; recordamos con mucho amor cruzrojista a los que ya no están con nosotros y los demás que aun sobrevivimos a la hecatombe de los tiempos.

Como nos ligó una gran amistad y una gran confianza y camaradería, en el seno de la CRH (en la primera avenida de Comayagüela) que era como nuestro segundo hogar, algunas veces por cuestiones de juventud no nos llamaban por nuestros nombres de pila, sino por sobrenombres adjudicados a nuestra labor y sin temor a ofender así de esta forma, recordamos con mucho cariño a la matrona doña Enriqueta Girón de Lazarus la fundadora (EPD), gratos recuerdos de amigos y hermanos a veces en el sufrimiento, a veces en los triunfos; todos egresados de la única, exclusiva y ya fenecida Escuela de Socorristas (a la que serví como Director en 1980) la misma que en 1976 nos confirió el grado de Socorrista Voluntario y que hoy formamos parte de su Reserva (por no decir de sus reliquias).

Lindos años; los cadetes de la Juventud, colaborábamos con la Fiesta de la Banderita; la venta de pinos navideños, las cajitas de la amistad ( de USA) para los niños pobres, el vaso de leche y el ropero de las Damas Voluntarias (Comite que segun me cuentan ya no existe en Tegucigalpa) y las actividades del Cuerpo de Socorristas como la atención en Hospitales en tiempos de huelgas; nuestras visitas a los asilos de ancianos, comedores infantiles, hogares temporales de la otrora JNBS; nuestra participación como decía antes, en el único Cuadro de Danzas Folklóricas de la CRH y del cual yo dirigía la música por medio de una antigua concertina (el chinguarrio o Chin.- con este sobrenombre se me conoce en el ambiente cruzrojista en Tegucigalpa).

Recordamos al eterno Comandante Nacional del Cuerpo de Socorristas, el sampedrano OMAR SUAZO y de la Cruz Roja de San Pedro Sula al comandante Sheran, Normita de la Radio, Luis Zelaya y a quimincho.- De la Ceiba a Nelson Saravia. Del insigne maestro de generaciones y Director General don MANUEL MORA DURON quien rompió todos los esquemas y paradigmas habidos y por haber dentro y fuera de la institución; por iniciativa propia y su relacion internacional hablaba tres idiomas, sumado a su basta experiencia en el campo cruzrojista; mi catedrático y guía después de mi egreso del Instituto Central como Perito Mercantil (pues labore para la institución como empleado en el Depto. de Contabilidad, primeramente con el Consejo Nacional del Lic. Cleto Alvarez y luego con el Consejo Departamental); recuerdos a sus hermanos Tomas Mora (quien laboraba en la ENEE. (E.P.D.) su hermana Soledad (y su hija Doris la esposa del “cusuco” ambos fallecidos) y José el comandante “comanche”; Horacio “lacho” Medina, Paul “payloder” Núñez, Andrés “tey”; los hermanos Landa nietos del esposo de una prima de mi abuela y de igual forma a “eli” o “ mari” cariñosamente para Maria Elisa Alvarado quien por un tiempo fungio como Directora de la CRH; Miguel Ucles y al inolvidable colombiano Jorge Ocampo "el cacorro" quien reside actualmente ensu paìs natal Colombia.

Recuerdos también del primer comandante del Socorrismo en Tegucigalpa Roberto Valenzuela (el copaneco); comandante Armando “Ganso”; del comandante Ernesto el “chacalín” García; del comandante Guillermo (memo) “Barco” Aparicio (epd); de la Comandante Reina Morazán, del Coordinador de la Juventud Julio Alberto Ruiz, la Profesora Berganza, Adán Morazán, Samuel A. Roque (E.P.D.), Geisser Salgado Moreira “el muco” y su primo Virgilio, Bany Joel Zelaya “el conejo”, Jorge “Bu bu “Lozano (medico especialista en acupuntura) y su hermano “bu bucito”; Margarita López y Verónica Chicas (Parejas del Cuadro de Danzas). Otros como “el gato” (por sus ojos), Will “pelo de mango”, Nolby Patricia Gomez; zancudo peinado y Gardelita Mencia; Chinda Díaz (Manuel Martínez Reina quien fue Administrador y fallecido en Enero 2015); Maria Camioneta, “el pelón” o “el profe” de Gregorio (Goyito) Barcenas o chile verde (aun labora en la benemérita) y compartimos buena relación amistosa, Rafael “fosforito”, Dora la trailera (enfermera en el Hospital Escuela), Elizabet Amador( labora en el Hospital Escuela); Lucia “Torres” Varela (labora en el Materno Infantil); Suyapa “la chilindrina” (por chiquita), José López “ el sismologo” (D.E.P.); el puma ya murio, el torofuego de Edgardo Castro “ el sampedrano” (hoy es diputado y periodista); Nicomedes Gómez Escalante, otra gloria del Socorrismo de la época dorada de la CRH, padre de los “chulas” (E.P.D.) conductor de la famosa ambulancia la 06; Jorge Caballero "caballon" por chiquito y Carlos "pan blanco" Matute (EPD) y su esposa que no recuerdo su nombre.

Tambien el Chichi de tancho (el hijo de Transito) miembro del cuadro Nacional de Danzas del pais; Beto “ quesadilla” motorista de Unimog; los tilosos ( los mecanicos), Ricky “Ricky-raca” Velasquez (EPD); Leonidas “la nina” Valladares (labora como medico en el Hospital Militar) tambien ya fallecido, Fabio Valladares (EPD), el gallo viudo, Tuco y tico ( Israel Castejon y José Rivera el Indito) amigos inseparables; Tiburón y su hijo el tiburoncito; Hostilio “lobo feroz” Rosales (el olanchano), La Seca de Rebeca Irias, Pedro “gorgojo” Sáenz (de Siguatepeque, por pequeño), Gustavo “el cusuco” Vásquez (EPD); Alejandro “ el profe” Vásquez, el empresario de la Portuaria Roberto Panayoti (panzayote) y su hermana que no recuerdo su nombre pero creo que se llama Paty; Roberto Galindo " ai le mando la animala" y don Antonio Hernández controladores nocturnos (EPD), doña Dora Henríquez (LVR) quien fue diputada al Congreso Nacional y presidenta del Consejo Departamental de F.M. (E.P.D.) cuando el presidente del CN era el licenciado y banquero Carlos Guillermo Zúñiga (E.P.D.), la picolina y Georgette Lama.

Y sigue la lista de estos grandes hombres y mujeres: “los cheles” Lisandro Valle (hoy medico neurocirujano en el Centro Medico) y su hermano Luis Valle Ingeniero; Francisco Haddad otro buen medico (no le conocí sobrenombre), Sergio “flecha veloz” Alvarado, hermano de “eli”, buen recuerdo de mi profesora garifuna Ana Lucia Jaime “numata” (laboro en el CENASA) y Carlitos “el mudo” educado por doña Meneca.

Con quien libre muchas batallas por el bien cruzrojista, fue con mi buena amiga Laura Inés Gómez Conde “ la india grande” (así se hace llamar como columnista); el doctor Carlos Colindres, Oscar Godoy “Carne asada” , Nelson “Baleada” Salmerón, Juan “Trucupey” Andino y su hermana Suyapa; Daniel “El travieso” Rivera y  mi buena amiga Norma Lara (Hija de doña Norma Ferrera de Lara y don Roberto Lara); Los hermanos Miriam y Danilo Valladares (este ultimo funcionario del RNP), Miriam Hernández, Marisabel Castejon, Patricia Lara (D.E.P.); Roberto Esquivel David(ahora medico y labora en el Honduras Medical Center), Tulio Garay, Tulio Escobar (fue motorista); al buen amigo Carlos Castro (E.P.D.), Felman “el chapín” Ordóñez y Corina la del Vaso de Leche.

Sigue en el desfile el comandante de Comunicaciones Dealer Toledo Sáenz de Siguatepeque, Mario “el mono” Morazán, Miguel “torreja” Torres, el querido y recordado por sus dotes de baletista Luis Paz hijo de don Miguel “Michel” Paz (D.E.P.); mi amigo de colegio que me hizo la invitación a la CRH José Francisco Pavón, Rene Maradiaga el motorista de la 01; otro mecánico Eddy, Roy Hernández y Luis Velazquez otros motorista de Ambulancias (las panaderas y Land rover) Miguel Irías (la miguelona); al buen amigo Tulio Vermont Méndez, administrador de la CRH, quien se radico en Canadá y allí falleció (D.E.P.); a mi guía de las ciencias contables David Santos Hernández (hoy un empresario cafetalero en Comayagua); Ivonne Romero, su

hermana Adela y su hermano Luis; las hermanas Ardon hijas de un periodista y vecinas nuestras en el barrio La Hoya, Ismael Alvarez (hoy abogado), Mario Landa (labora para el Congreso Nacional); a la otrora secretaria del Consejo Nacional,  la olanchana Eda Rosa Figueroa y al coordinador de servicios a la comunidad de esos años Nelson Tabares (EPD); al recordado amigo el Socorrista Voluntario de mas edad (porque se graduó en su tercera edad) don Roberto Ney Cubells (D.E.P.), encargado de la clínica de Primeros Auxilios por sus conocimientos médicos y padre de una ex-compañera de Escuela.

Las hermanas Barbara y Olga Fiallos de Siguatepeque de la misma promoción, igualmente a las hermanas Kurwan y Rolando San Martín (h); también quien fue Administrador del Consejo Departamental el buen amigo Jorge Alejandro Aldana, Rosita Casco Sagastume; don Raúl “manix” Alvarado y su esposa doña Norma Meléndez; el querido “Panchito” nuestro esqueleto de practica que me imagino que “Mitch” lo sepulto en la primera avenida de Comayaguela y especialmente a la viejita que se paseaba a media noche por los pasillos y el garaje de la sede.

Por la gloriosa Escuela de Socorristas desfilaron en los cursos libres (que antes se llamaban multimedia) personalidades del mundo empresarial, militares (cubrimos dos promociones en la ANAPO y en la FCO. MORAZAN), profesionales, banqueros, alumnos de centros privados y otros particulares.

Son parte importante de este homenaje las Damas Voluntarias grupo especializado en la obra social de la CRH con niños, Jardín de Niños, etc. Recordamos gratamente a las primeras Damas de la época a que nos referimos: una excelente colaboradora, buena amiga y fiel guía doña Yolanda Kennedy (D.E.P.); doña Alma Sheib (un ángel de Dios), doña Gloria de Tercero Palma (vecina de mi familia en Comayaguela), doña Anna de Nasralla, Teresa Agurcia Ortiz y su hermana Mercedes “Cheyes” (D.E.P.) ultima con quien compartimos ratos agradables en su casa de habitación de Palmira y en su Hacienda de Valladolid junto a don Nico y Luis Paz ambos fallecidos (allí se llevó a cabo un campamento de Socorrismo); doña Alejandrina de Villeda Morales, doña Alba Nora Gunera de Melgar a quien visitábamos en vida del general Melgar Castro ( su nombre llevo la ultima promoción de la Escuela de Socorristas); doña Elizabeth Lobo, doña Gaby Matuty de Tentori, la señora de Bustamante, doña Corina de Barrio (nuera de Dora Henríquez), doña Zonia Matilde Fiallos de Flores Gómez, doña Margarita de Martínez, doña Consuelo Valladares de Aguiluz (D.E.P.), doña Rosa Ester “locha” de Suárez (secretaria eterna del Consejo Nacional), doña Mila de Gómez Márquez, doña Pucha Pina, Señora de Vinelli (esposa de Paúl Vinelli D.E.P.), la fundadora del grupo de Damas Voluntarias en Siguatepeque doña Margarita Rausher; doña Iris Ulargui (D.E.P.) y doña Meneca de Mencia. Que me disculpen aquellas personas de quienes no recuerdo sus nombres, los tengo en mi corazón.

Cuanto podemos mencionar de nuestro voluntariado cuya formación fue estrictamente profesional; contando en su haber con catedráticos universitarios y médicos especialistas en farmacología, ginecología, Cirugía Menor, reumatología y ortopedia, y técnicos en humanidades a quienes agradezco infinitamente su colaboración. En estos tiempos se trabajaba como con las “uñas” por medio de la“improvisación” que fue y debería seguir siendo la guía básica en los primeros auxilios.

Hoy día con las técnicas modernas, pienso que se ha perdido aquel esmero, la calidad de la vida, el espíritu de vocación de servicio y de seguridad por la vida humana, prácticamente el altruismo se ha metalizado. La mayoría de los que nos consideramos “reservistas” y de los que de mi época sobreviven en las filas de la CRH, no deben olvidar de donde venimos, que vivimos las mejores épocas, que construimos las bases del nuevo Socorrista Voluntario. Ayer fuimos útiles y no somos indispensables pero lo genuino prevalece; no debemos ser genéricos como los medicamentos, pues nuestro lema siempre será NEUTRALIDAD Y SERVICIO. ¿Y que paso durantes las acciones de Socorro? les debo las anécdotas de experiencias vividas. Aun con sus debilidades la Cruz Roja necesita del aporte de todos, de todo un pueblo a quien ha servido desde 1937.

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