Galel Cardenas
Ayer se produjo la lluvia de peces en Yoro. Cayeron granizos grandes en la Unión,pOlancho, se regalan gallinas presidenciales, las sumas de infectados, curados y muertos producen una suma que es falsa, nadie puede abrazarse en la calle y ya vamos a completar dos meses de cárcel hogareña, todos somos enmascarados, somos números los que salimos a la calle, yo soy dos, no soy Galel, debo estar a un metro de mi congénere, como si fuera planta venenosa me desinfectan irrigándome, los sábados y domingos los ocupábamos para fiestas y paseos, hoy son días de encierro absoluto, el virus es una proteína, no es un ser vivo, si morimos junto a otros nadie nos vela y nos entierran como seres asquerosos, ahora al que se acerca le tememos por el contagio, en fin, algo raro nos pasa, el petróleo no cuesta nada, y nos quieren meter un chip en las vacunas nuevas, las calles antes llenas de movimiento hoy son desolaciones silenciosas, antes trabajábamos junto a la gente, hoy lo hacemos frente a una pantalla, el ejército ahora es el agricultor, los hospitales nuevos son de plástico, nos gobiernan por cadenas mediáticas, los profesores y los alumnos son virtuales, en fin, son los tiempos que vivimos.
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