Esta espeluznante danza de millones en plena pandemia, ha caido como anillo al dedo para Juan Orlando Hernández y su camarilla; ha salido mejor que los desmadres ocasionados al IHSS, a la SAG y a otras instituciones , casos que no olvidamos como el robo mas grande del siglo en esta calamitosa Honduras y, sin olvidar también las ganancias onerosas del narcotráfico; todo para apoyar una fraudulenta reelección.
Podemos sumar esta nueva mala praxis, porque a todas luces asi será y ya se están descubriendo compras sobrevaloradas en alimentos, en equipo e insumos médicos y de mala calidad etc… dicho sea de paso, alimentos que no llegan a las mayorias, sino a los que están en listas que se suponen son nacionalistas, gobierno inescrupuloso y dejar por fuera a aquellos que de verdad deja su dia a dia tirado sin opción a obtener ingresos y por su seguridad a permanecer en su casa, mientras otros hacen de las suyas con dineros donados o con fondos extraidos del erario publico.
Vamos sumando para los que no saben, no entienden o sea hacen los papos. Desde lo que ha aflojado el congreso nacional que dicen que es y no es, los 420 millones de dólares para paliar la pandemia y despues salieron que no es para eso; 110 primero y 220 millones de lempiras después; 2 mil 500 millones de dólares hace poco.; 145.5 millones de dólares que les solto el FMI para lo mismo, hoy 222,500 millones de dólares que el gobierno de Trump aporta como ayuda o donacióny 119 millones de dolares del Banco Mundial; mas los 30,600 millones que pretenden liberar del BCH para reactivar la economía dicen después de la pandemia; es una barbarie en plena Semana Santa que ni eso respetan.
El chapulin colorado es una fantasia de super héroe para pedir auxilio en estos momentos, donde se fragua algo monstruoso en contra de la débil democracia que gozamos, que mas que democracia es una dictadura; pues todos los poderes, fuerzas del orden publico y, empresarios concentrados en una sola persona; que esta a punto de proclamarse dios y a menos de un segundo de destartalar el andamio institucional, para construir como dice el, la Honduras del futuro hacia los próximos 20 años; donde con balas y con dinero cualquiera es poderoso.
Una vorágine, donde el pueblo sufre el embate de una pandemia que jamás se esperó en virtud de las peores circunstancias de nuestro sistema de salud, donde hay mas fusiles que camas; mas balas que mascarillas, mas tanquetas que ventiladores mecánicos; mas militares que médicos y enfermeras; sumado al servilismo ante Estados Unidos al no permitir el paso de médicos de Cuba. Una vorágine, que mientras el pueblo se muere en los hospitales, nos imaginamos que ellos danzan alrededor de los millones en bacanales de sexo y alcohol como algunos acostumbran. No queremos imaginarnos si quiera, que este señor en su mente, recree que el puede ser miembro de un grupo de degenerados que piensan que la tierra tiene habitantes en demasía y el este apoyando esta idea barbárica.
Pero no podemos llorar, por mucha dignidad que profesemos hemos sido un pueblo egoísta con nosotros mismos, nos hemos acobardado; es cierto, nadie quiere morir con las botas de otros puestas en el pecho, o ahogado por los gases lacrimógenos; pero nadie quiere humillarse al Dios Altísimo sin tapujos ni artilugios de ninguna naturaleza; esto, que es mas fácil que andar en una protesta o reclamar en redes sociales, no lo tomamos en cuenta y dejamos que el tiempo y la circunstancia siga su curso y nos dejamos desmayar, nos dejamos vencer.
En nuestras manos esta.
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